Para concretar el cierre, el presidente de Estados Unidos necesita la aprobación del Senado, algo que parece improbable que se dé
Donald Trump busca cumplir una de sus promesas de campaña al firmar un decreto que propone el desmantelamiento del Departamento de Educación. Según el presidente de los Estados Unidos, con esta medida busca “devolver el poder a los padres” sobre la instrucción de sus hijos.

A través del escrito le solicitó a Linda McMahon, recién nombrada secretaria de Educación, que inicie las tareas de demolición, algo que la funcionaria no tiene el control total para hacerlo. Es importante destacar que el cierre del Departamento necesita la aprobación del Congreso y obtener el voto de 60 senadores, algo que parece bastante improbable.
Los republicanos cuenta con 53 lugares en la Cámara Baja. Además, la medida no contaría con el apoyo de ningún integrante del Partido Demócrata, por lo que la decisión de Trump se lee sobre todo como un gesto político hacia su electorado.
En lo que si puede avanzar McMahon es en la reducción del Departamento de Educación a su mínima expresión y sacarle algunas de sus funciones para que se gestionen a otras partes de la Administración.