Se trata de Juan Manuel Ondarcuhu, quien fue investigado por presunto lavado y contrabando.
El empresario peronista Juan Manuel Ondarchuhu, investigado por presunto lavado y contrabando, usa el Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) del presidente Javier Milei para crear un puerto desde cero en la Hidrovía Paraná-Paraguay, que representará un desembolso de u$s290 millones.
Mientras el Gobierno nacional trabaja en la presentación de una nueva licitación para su dragado y balizamiento, el emprendimiento del Puerto Timbúes, en San Lorenzo, Santa Fe, desde la empresa Terminales y Servicios piensan en este proyecto como una posibilidad para trabajar con cargas de mayor valor agregado que podrían ser aprovechadas por las provincias del norte.
Después del apoyo del gobierno de Santa Fe, los inversores pretenden llevar el proyecto por las vías del RIGI para así obtener incentivos impositivos y fiscales para el desarrollo que sería a gran escala.
De acuerdo a la propuesta, la instalación portuaria se establecerían sobre terrenos que pertenecían a la firma Fiplasto, que el 22 de febrero se desprendió de las mismas por 12.808.320 dólares. La venta de esos lotes le servirá a la empresa para recibir un importante ingreso, en tiempos complejos para su actividad -la industria maderera-, que posee una caída del 72% de caída.
Ondarcuhu es un referente histórico de la casta portuaria y opera las Terminales VI y VII del puerto de Rosario. Es un peronista que tiene llegada a Juntos por el Cambio por su conexión con dirigentes de San Nicolás, donde está ubicada su empresa.
El empresario fue sobreseído por el juez federal Daniel Rafiecas en una causa en la que se los investigó por un presunto delito de contrabando y lavado de dinero.