La compañía que realiza productos lácteos tiene una deuda financiera superior a los 400 millones de dólares. Ya despidió a cerca de 500 empleados en la última semana.
Las empresas alimenticias atraviesan un escenario complejo. En ese sentido, SanCor, que viene de paralizar la actividad en dos de sus instalaciones en Córdoba, posee una abultada deuda de servicios por lo que lo uno de sus proveedores de electricidad decidió interrumpir el suministro.
El corte de luz se produjo en la planta de Balnearia, en Córdoba, donde se fabrican los quesos semiduros como el fontina, el danbo y el pategrás.
La Cooperativa de Provisión de Obras y Servicios Públicos Balnearia se acercó al a fábrica de la compañía para desactivar el servicio y sacó la instalación de luz y el cableado de conducción.
Al haber reducido las actividades el Balnearia y La Carlota, SanCor mantiene su funcionamiento en la planta de Devoto, en Córdoba, donde hace el queso crema Mendicrim y mantecas; mientras que en Gobernador Gálvez y Suncháles se encarga de hacer sus leches larga vida, chocolatada, infantiles y en polvo, y dulce de leche.
Esta crisis de la empresa se da en paralelo a una decisión de reducir el personal. Desde la semana pasada, alrededor de 500 trabajadores recibieron un telegrama de despido de parte de la firma. El argumento fue por “razones de fuerza mayor ajenas a la voluntad de la compañía, que son de público conocimiento”.
Según los registros, la empresa tiene una deuda financiera superior a los 400 millones de dólares.