El ministro de Salud destacó que los remedios suben menos que la inflación y consideró que eso equivale a una baja
“Yo te voy a decir al revés: los medicamentos están aumentando menos que la inflación. Eso es una manera de bajar, ¿no?”, expresó el ministro de Salud, Mario Lugones, durante su participación en el foro empresarial AmCham. La frase apunta a destacar una desaceleración en los precios del sector farmacéutico.
Según datos oficiales, en marzo de 2025 los medicamentos subieron un 1,3% frente al 3,7% del Índice de Precios al Consumidor, y en 2024 el alza fue del 87,2% frente al 117,8% del IPC general. A simple vista, la tendencia parece positiva. Sin embargo, las cifras no alcanzan a reflejar la complejidad que viven muchos ciudadanos al momento de acceder a tratamientos.
El contraste más evidente se da a la hora de analizar el acceso a medicamentos de los jubilados. A pesar de que sus haberes aumentaron un 109% en 2024, esa suba quedó rezagada frente a la inflación. Además, los cambios en la cobertura del PAMI redujeron la gratuidad en la provisión de medicamentos. Como resultado, miles de beneficiarios enfrentan gastos cada vez más difíciles de afrontar, especialmente en tratamientos crónicos.
Otro punto de conflicto está en la disparidad de aumentos entre medicamentos. Mientras el promedio general muestra cierta moderación, algunos productos esenciales registraron alzas de más del 400% en el último año y medio. Casos como el Nutrilon Pepti (596%) o el Ibupirac 600 mg (456%) contradicen la narrativa del Gobierno. A esto se suma el antecedente de 2023, cuando los medicamentos aumentaron un 275,6%, muy por encima del IPC general.