Desde la cuenta oficial de WikiLeaks confirmaron que su editor en jefe fue liberado y ya se encuentra rumbo a Australia luego de haber llegado a un preacuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Después de permanecer 1901 días encerrado en una prisión de máxima seguridad en el Reino Unido, aislado 23 horas al día en una celda de 2×3, el periodista recuperó su libertad en las últimas horas y está siendo trasladado a su país para reencontrarse con su familia. La decisión la tomó el Tribunal Superior de Londres que le concedió la libertad bajo fianza.
En las redes sociales de WikiLeaks resaltaron que su liberación “es el resultado de una campaña global que abarcó a organizadores de base, defensores de la libertad de prensa, legisladores y líderes de todo el espectro político, hasta llegar a las Naciones Unidas” y explicaron que eso “creó el espacio para un largo período de negociaciones con el Departamento de Justicia de Estados Unidos, que condujo a un acuerdo que aún no se ha cerrado formalmente”.
A su vez indicaron que van a proporcionar “más información lo antes posible”, aseguraron que como editor en jefe, “Julian pagó severamente por estos principios y por el derecho del pueblo a saber” y agradecieron el acompañamiento y el compromiso en la lucha por su libertad.
“WikiLeaks publicó historias innovadoras sobre corrupción gubernamental y abusos contra los derechos humanos, responsabilizando a los poderosos por sus acciones”, recordaron en el comunicado y para concluir destacaron, “la libertad de Julian es nuestra libertad”.