El ex presidente se reunió con el bloque del PRO, a quien felicitó por la unidad en la agenda legislativa.
El ex presidente y titular del PRO, Mauricio Macri, se reunió este martes con los diputados de su partido y si bien no hubo una bajada de línea puntual, les pidió a los legisladores que no “dejen al Gobierno en manos de los orcos”.
No es la primera vez que Macri hace referencia a los “orcos”. Estas son criaturas fantásticas creadas por el escritor J.R.R Tolkien, que aparecen en varias novelas, puntualmente en “El Silmarillion”, “El Señor de los Anillos” y “El Hobbit”.
Los orcos se mueven independientes, pero son poco inteligentes. A veces son astutos, miserables y deformes. Se caracterizan por odiar todo lo que existe, incluso a ellos mismos. No pueden hacer algo que sea hermoso o artístico y su tecnología solo la usan para destruir y matar a hombres y elfos.
El encuentro del ex mandatario sirvió para repasar la agenda legislativa y, sobre todo, su postura frente al Presupuesto 2025. En ese marco, les solicitó que respeten la premisa del presidente Javier Milei, sostener el equilibrio fiscal.
La imagen de este martes resume un punto a favor para el espacio amarillo. Mientras el radicalismo y el peronismo se cortan la cabeza en internas feroces, el PRO se mantiene unido más allá de ciertas diferencias. Está claro, ya sin el sector que representa la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien forma parte del Gobierno y es prácticamente una más de La Libertad Avanza (LLA).
Para Macri, “el bloque fue lo mejor del PRO en los últimos cinco años”, por lo que felicitó y agradeció a los diputados que son conducidos por Cristian Ritondo.
En el encuentro, se definió que este miércoles el PRO no iba a presentar un dictamen propio respecto sobre la modificación de la ley de Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), un tema que trae diferencias dentro del bloque.
Respecto del Presupuesto 2025, Macri postuló a Ritondo como su único referente a la hora de negociar con el Gobierno. El ingeniero cree que es fundamental la reactivación de las obras públicas con convenios firmados entre Nación y las provincias, que fueron suspendidos. El foco está puesto en Entre Ríos, Chubut y la Ciudad de Buenos Aires, tres jurisdicciones comandadas por el PRO.