Para Guillermo Michel el saldo comercial es “ficticio”. Mientras que para Carlos Rodríguez el resultdo fiscal es “una chantada”.
El pasado viernes el Gobierno celebró el superávit comercial de septiembre, que fue de US$ 981 millones y con un saldo favorable acumulado de US$15.132 millones en lo que va del año. Las exportaciones tuvieron un salto del 20,6% en las exportaciones, para llegar a US$6.934 millones.
Este superávit es visto con desconfianza por algunos analistas y ex funcionarios, como es el caso de Guillermo Michel, ex directo general de Aduanas y muy cercano a Sergio Massa. El contador y abogado entrerriano llamó “ficticio” a este superávit comercial. En su cuenta de X aseguró que la forma en el que se está logrando no permite acumular reservas.
Allí subió un cuadro y explicó que, si bien el calculo entre exportaciones e importaciones da un saldo favorable, en el saldo real este valor es mucho menor producto del dólar “blend”, mecanismo que el Gobierno prolongo por decreto.
Otros de los que se mostró críticos sobre este balance comercial fue Carlos Rodríguez, quien fue asesor de Milei y sonaba para ocupar el rol de Luis Caputo antes de que comenzara el gobierno libertario.
El economista criticó la metodología de colocación de deuda y la emisión de títulos para realizar las operaciones de corto plazo. “Antes emitían Pases, Leliqs, Lebacs, etc. y eso no figuraba en el déficir financiero del Tesoro, solo figuraba en el déficit cuasifiscal del BCRA. Ahora pasaron la deuda remunerada del BCRA al Tesoro y se llama LECAPS”, analizó.
Rodríguez llamó esto como “una chantada” y advirtió que el déficit sigue. “No engañan a nadie, solamente pierden credibilidad“, concluyó.
En esta línea, Carlos Maslatón, quien también estuvo cerca de la Libertad Avanza, consideró que “los enjuagues financieros de Caputo y Milei, escondiendo deuda y jugando con la deuda para garantizar la bicicleta de la City, es un fraude al Estado y al pueblo”.
Y remató: “Va a ser un escándalo cuando salten los números reales fiscales y de deuda del gobierno de Caputo y Milei. Nunca nadie endeudó tanto y tan rápido al país como estos dos delincuentes asociados”.