La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) llevará a cabo un proceso de reestructuración interna para reducir costos. La medida se llevará a cabo a través de un decreto publicado en el Boletín Oficial y se produce luego de la aprobación de la Ley de Bases, que le da la potestad al Gobierno de achicar organismos del Estado.
El ajuste de la AFIP, liderada por Florencia Misrahi, busca un achicamiento de la Dirección General de los Recursos de la Seguridad Social (DGRSS), a través de la fusión de distintas áreas que no solo bajará los gastos, sino también que servirá para que los contribuyentes tengan una ventanilla única.
De acuerdo al plan de acción, la idea principal es hacer más eficiente y modernizar los controles de fiscalización respecto de la moratoria y el blanqueo. Unas ocho direcciones y tres subdirecciones serán eliminadas, por lo que se reducirán 44 unidades estructurales. Este proceso comenzará a tomar forma desde la próxima semana.
Desde AFIP aseguraron que no habrá despidos, sino que los 700 empleados que trabajan en la Dirección General de Recursos de Seguridad Social serán removidos a la DGI para fiscalizar. Esa área actualmente posee 1.000 agentes.
Castagneto critica la reestructuración de la AFIP
El diputado nacional de Unión por la Patria (UxP) y ex titular de la AFIP, Carlos Castagneto, dialogó con Mosca y consideró que esta decisión “es lo que representa Javier Milei, un Estado ausente, donde no se respetan más muchas leyes, derechos laborales. Creo que va a venir un achicamiento del Estado y una ausencia muy grande hacia adelante”.
En ese sentido, alertó que luego de la aprobación de la Ley de Bases, la sociedad va a sentir “vulnerados sus derechos, porque no tenés la presencia del Estado”.
Luego, concluyó: “Por eso nosotros rechazamos la ley, porque consideramos que tenemos que tener un Estado que respete las legislaciones y el trabajador se sienta respaldado por un Estado que defienda sus derechos”.