El Gobierno celebró el superávit comercial de USD 2.498 millones de noviembre. Curiosamente, este saldo positivo se da en medio de la apertura a las importaciones que promueven Milei y Caputo
El superávit comercial de USD 2.498 millones alcanzado por el Gobierno trajo tranquilidad en Casa Rosada. Este valor se explica fundamentalmente por la reducción en las importaciones, que bajaron un 21,7%.
Este cambio de tendencia generó un debate abierto, donde se difundieron dos hipótesis. Una de estas la expuso el economista Pablo Wende, quien consideró que la baja de las importaciones se dio producto de la recesión. “Se desacelera muy fuerte el incremento de las importaciones. Muchos que empezaron a importar no vendieron y tienen que bajar fuerte los precios para sacarse la mercadería de encima”, posteó el periodista en sus redes sociales.
Otra hipótesis es que hubo un efecto electoral que adelantó las importaciones antes de las elecciones. Según Hernán Letcher, podría haberse dado una mezcla de ambas. “En realidad, esa es una hipótesis (lo que dijo Wende). La otra hipótesis es que algunos con la eventual expectativa de devaluación, adelantaron importaciones. Yo me inclino más por esta segunda, aunque pueden ser una mezcla de las dos”, dijo el director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) en diálogo con Mosca.
El gran protagonista del mes fue el rubro de productos primarios, que se disparó un 87,1% interanual y alcanzó su valor más alto desde diciembre de 2021. Este salto se debió principalmente a las exportaciones de soja: los porotos de soja representaron u$s 874 millones, con un aumento extraordinario del 2.031% respecto a noviembre de 2024.







