El índice oficial mostró una fuerte baja, pero desde el gremio advirtieron que este número no es un reflejo de la realidad
La publicación del último informe del INDEC sobre pobreza provocó un fuerte contrapunto. El organismo difundió este jueves que el índice alcanzó un 31,6% en el primer semestre de 2025, que representa la cifra más baja desde 2018. El dato fue gritado como un gol por el Gobierno, que busca dar vuelta su imagen tras varias semanas para el olvido. “LA POBREZA SIGUE BAJANDO. LA LIBERTAD AVANZA O ARGENTINA RETROCEDE”, publicó Javier Milei en sus redes sociales.
Si bien varios organismos se mostraron disidentes a este análisis, el que más llamó la atención fue el de los propios trabajadores del INDEC, que difundieron un comunicado a través de un video donde mostraron cuáles son los fundamentos que ponen en tensión la veracidad de esta medición.
Según el gremio, el Ejecutivo compara períodos “incorrectos”. Milei asumió en diciembre de 2023 y las mediciones oficiales contrastan los niveles actuales con el pico de pobreza del primer semestre de 2024, un momento atravesado por la devaluación y la inflación que el propio gobierno generó. Para ellos, atribuir una mejora a partir de esa base inflada equivale a medir una crisis autoinfligida.
Otro de los puntos cuestionados es la magnitud de la reducción. Los trabajadores recordaron que la Encuesta Permanente de Hogares cubre solo a unas 30 millones de personas en áreas urbanas, por lo que una baja de 12 millones representaría una caída del 40%. “Eso no ocurrió”, remarcaron. Además, advirtieron que es un error metodológico extrapolar lo que sucede en las zonas más densamente pobladas al total del país.
Por último, pusieron foco en la pérdida de calidad de los empleos y consideraron que el informe no muestra esa parte de la realidad. “La relativa y precaria mejora en el indicador de pobreza no tiene un correlato en una mejora general de los indicadores de mercado de trabajo, ni en un crecimiento de la economía”, sostuvieron al final del video.