Con ventas masivas en el mercado de dólar futuro, el BCRA logró derrumbar las cotizaciones para los próximos meses. La maniobra busca anclar expectativas de devaluación, pero genera dudas por su sostenibilidad
El Banco Central intervino con fuerza en el mercado de dólar futuro para tratar de calmar las expectativas de una suba del tipo de cambio. En los últimos días, vendió una gran cantidad de contratos y eso hizo que bajaran con fuerza los precios del dólar para los próximos meses. Es una jugada que apunta a frenar la presión sobre el dólar oficial, en medio de un clima financiero cada vez más tenso.
El precio del contrato de dólar a julio bajó un 14%, el de agosto un 10%, septiembre un 12% y octubre un 7%. Se trata de caídas fuertes, que muestran cuán activa fue la intervención del Banco Central. Al ofrecer dólares a futuro más baratos, logró torcerle el brazo al mercado.
Este tipo de estrategia busca frenar la idea de que se viene una devaluación. Si los contratos futuros bajan, eso ayuda a enfriar las expectativas y, con suerte, también los precios. Sin embargo, esto tiene ciertos riesgos, ya que si el Banco Central vende futuros, se compromete a pagar la diferencia si el dólar oficial sube más de lo que se esperaba. Y si esa diferencia es grande, puede costar muchos pesos.
Además, ya hay antecedentes en Argentina de este tipo de maniobras. En 2015, una venta masiva de dólar futuro terminó en una causa judicial. Aunque esa causa se cerró, dejó un mal recuerdo y genera recelo cuando se repiten jugadas similares.