El sector dialoga con las autoridades para que se tomen medida. Critican la llegada de estas plataformas de servicio puerta a puerta mediante courier.
En medio de una caída del sector, el rubro textil se había ilusionado con que desde la Agencia Nacional de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) se iban a tomar medidas con las compras realizadas a través de las plataformas Shein y Temu. Sin embargo, la entidad salió a aclarar que el rumor era una fake news y a Mosca aclararon que no tomarán decisiones al respecto.
El sistema de envío puerta a puerta mediante courier es fuertemente criticado por el rubro textil, que presenta un panorama grave puertas adentro con cierre de empresas, despidos y suspensiones. Según un informe de la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI), las ventas cayeron 7,7% en el tercer bimestre de este año contra el mismo período de 2024.
El empresario textil y vicepresidente de Fundación Pro Tejer, Marco Meloni, dialogó con Mosca acerca de la aparición y la falta de control de las plataformas Shein y Temu en la Argentina, las cuales perjuican aún más el escenario para el sector.
“La visión general que tenemos es la misma que tiene Estados Unidos y los países industrializados y más desarrollados de Europa Occidental, que están tomando medidas. Francia lo prohibió y Estados Unidos le cobra impuestos y no permite que se supere una cierta cantidad”, comenzó.

“La visión particular es que son plataformas de esclavos, no solo manchada de sangre y sin trazabilidad social, sino también sin control en cuanto a lo sanitario. Nosotros tenemos prohibido en Argentina utilizar ciertos productos como amoniaco, que son mucho más baratos y efectivos, pero que pueden hacer mucho daño a la salud por un artículo que después va a ser usado sobre la piel”, agregó.
“El descontrol que provoca ese no control es peligroso para la salud y para la competencia leal”, destacó Marco que criticó las condiciones de trabajo a la que someten a los empleados vinculados a esas plataformas, como así también los procesos que usan que derivan en la contaminación ambiental.
En ese sentido, detalló: “Talleres de esa plataforma trabajan 16 horas por día, con sueldos que están por debajo de los 100 dólares mensuales. Se viene un cambio que va a aplicar o controlar ese tipo de plataformas. En ese camino que se está recorriendo, se aprovecha al máximo traer una prenda que no dura más de cinco lavados, de dudosa procedencia en cuanto a su composición química con la que se ha hecho y sin trazabilidad social”.
Meloni resalta que estas plataformas llegan a una Argentina “que tiene un consumo totalmente disminuido y un país que está muy caro en dólares por la subvalía de esa moneda”.
“El problema es la suma de desgracias. Al estar erosionado el mercado interno, al abrir las importaciones normales, por container, que son muchos más baratas, se suma también el turismo en el cual son turismos que son prácticamente para hacer compras. A eso se suma el contrabando en distintos puntos del país. Si agregás esto, todo te mueve. Se nota el impacto de la suma de las circunstancias negativas que estamos viviendo”, agregó.
La semana pasada, la Cámara Industrial de la Indumentaria (CIAI) usó datos del INDEC y del Banco Central para mostrar en un informe que entre enero y mayo de este año los argentinos gastaron más de 1.572 millones de dólares en ropa comprada en el exterior. A raíz de ello, surgieron noticias falsas sobre que Arca iba a tomar medidas para bloquear este tipo de transacciones.
Finalmente, el organismo salió a desmentirlo. En diálogo con este medio, remarcaron que “no saben de dónde se originó”. Si bien se desligaron de que “las medidas las establece Economía”, desde ARCA señalaron que “no está previsto” tomar alguna decisión con estas plataformas.
“Por supuesto que sería beneficioso”, dijo Meloni a Mosca sobre la posibilidad de que el Gobierno tome medidas al respecto. “Lo dialogamos con la subsecretaría Pyme que ahora no está más y con la gente que sigue trabajando”, expresó.
“Nos escuchan, pero priorizan la libre entrada de mercadería pensando, equivocadamente, que va a disciplinar precios que ya están súper bajos. Lo que están haciendo es contribuir a la expulsión de gente y, por ende, recaudar menos”, finalizó.