Según le indicaron a Mosca, la funcionaria fue echada por Raúl Jalil a partir de este hecho
En Catamarca se generó un escándalo por la entrega presuntamente fraudulenta de la mina Cerro Atajo, rica en oro y cobre. Aunque la denuncia penal involucra principalmente al gobernador Raúl Jalil, fuentes reservadas le confirmaron a Mosca que fue Susana Peralta quien ordenó y ejecutó la adjudicación irregular de la mina a la empresa Lua Mining, una firma sin antecedentes constituida apenas semanas antes de recibir el contrato.
La maniobra, denunciada públicamente por el diputado Francisco Monti, consistió en otorgar los derechos de exploración y eventual explotación de Cerro Atajo a Lua Mining, cuya titular formal es secretaria de Mario Cirigliano, un empresario con estrechos vínculos personales y comerciales con Jalil.
Sin embargo, el rol decisivo lo habría tenido Peralta, quien fue removida por el gobernador catamarqueño de su rol como presidenta de Camyen, donde manejaba todas las decisiones estratégicas de la empresa estatal.
La adjudicación a Lua Mining se concretó con celeridad inusual y sin justificación técnica, favoreciendo a una empresa sin experiencia en el sector. El bloque opositor, incluyendo a La Libertad Avanza, prometió llegar al fondo del escándalo.