Esto le permite al oficialismo reforzar el “colchón de liquidez” para pagar deuda.
El Tesoro Nacional colocó $4,24 billones en la primera licitación de deuda en pesos de julio. Así, renovó vencimientos por $1,05 billones y captó un fondeo extra (de $3,19 billones) que dejará depositado en la cuenta del Gobierno en el Banco Central.
Lo hizo en la antesala del lanzamiento de las nuevas letras de regulación monetaria o Letras Fiscales de Liquidez (el nombre que finalmente tendrán), con las que apuntan a transferirle al Tesoro el stock remanente de pasivos remunerados que hoy posee el Banco Central.
Minutos después de la subasta, el Ejecutivo publicó el decreto que da el puntapié inicial para el futuro esquema monetario. La Secretaría de Finanzas informó que, en la licitación, recibió ofertas por un total de valor efectivo de $5,91 billones para los siete títulos que había incluido en la operación. Sin embargo, decidió declarar desierta la subasta de dos de ellos y, finalmente, adjudicó $4,24 billones.
Este viernes, el Tesoro enfrenta vencimientos por $1,05 billones correspondiente a una LECAP (letra a tasa fija capitalizable). Así, consiguió un endeudamiento adicional de casi $3,2 billones que, según adelantó el secretario Pablo Quirno, “será depositado en la cuenta del Tesoro en el BCRA”. En esa cuenta, el Gobierno ya contaba con $12,2 billones, que rinden 0% de intereses.
NA.